La robotización de los políticos
Teresa Barro
La nueva era
tecnológica en la que estamos entrando traerá por fuerza grandes cambios en
cuanto a los trabajos que surjan o desaparezcan y la categoría que se
establezca entre ellos. Momentos como este, de paso de una era a otra, fueron
siempre aprovechados por las elites para dictar el futuro mezclando la verdad
con el engaño, envolviendo todo en un tinte fatalista que haga pensar que no
hay más que un camino y hundiendo en la miseria a la mayoría para seguir ellas
mandando. La única verdad que hay que admitir en estos momentos es que la computarización
y la robotización traerán cambios para los que hay que prepararse cultivando visión,
flexibilidad y juicio. Esta verdad se tergiversará con enredos y mentiras. Los
mismos que hablan del mercado flexible y de condiciones laborales flexibles no
aplican esa flexibilidad a sus propias actitudes, rígidas y dogmáticas, no ven
más que su propia conveniencia y tratan por todos los medios de impedir que se
ejerza un juicio que echaría abajo sus dogmas y su dominio.
Las máquinas, las
computadoras y los robots no podrán hacer nunca trabajo creativo y no podrán
sustituir la relación personal, que es también creativa. La creación surge de
la pasión, y la capacidad de pasión sólo la tienen los humanos. Las elites
tratarán de definir lo que es creativo y lo que no lo es y, en nombre de las
definiciones astutas y falaces que harán, llevarán a la miseria y a la
esclavitud a los que son o podrían ser mucho más creadores que ellas. Las
elites nunca crearon nada porque no tienen pasión creadora y el vicio de la
codicia hace que agosten todo lo que tocan. Son las elites y los políticos los
que pueden ser sustituidos por computadoras y robots. Un gobierno de robots no
lo haría peor que casi todos los gobiernos del mundo en estos momentos. No se
notaría la diferencia si se sustituyesen los partidos políticos convencionales
por robots que aprendiesen la doctrina y emitiesen las frases hechas y sin
sentido con que los llamados políticos tratan de salir del paso y ocultar que
no están haciendo política y que lo único que quieren es hacer carrera y dinero
para ser elite.
Mayo de 2014
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