Austeridad y despilfarro


Teresa Barro
 
Los políticos europeos están tratando de echar la culpa del desastre económico y las consiguientes exigencias de austeridad a algunas naciones y ciudadanos que, según ellos, no se administraron bien. Sin duda hay países mejor administrados que otros, pero los más austeros y mejor administrados aprovecharon el mercado cautivo de la Unión Europea y permitieron a sus bancos e instituciones financieras que jugasen con el dinero de los demás.
A los políticos de la Unión Europea no les importó que se estuviese impulsando el despilfarro y haciendo creer que la Europa unida daba entrada a un mundo maravilloso en el que estaba garantizada una prosperidad sin fin. En la Unión Europea se erosionó la soberanía de las naciones que la integran y se las dejó sin poder de maniobra y salvaguardia a cambio de asegurarles la estabilidad económica. Toda posibilidad de que ese intercambio trajese el bienestar prometido desapareció cuando, para forzar la unión política, no se tuvieron en cuenta las verdades económicas. El desastre económico y el sufrimiento que resultó de todo ello es culpa exclusiva de las elites nacionales e internacionales, de derechas y de izquierdas, que ahora predican y exigen austeridad mientras saquean las naciones y se reparten el botín.
Mayo de 2012

Comentarios