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Mostrando entradas de diciembre, 2013

España y las lenguas

Teresa Barro La postura de España frente a las lenguas, las propias y las extranjeras, suele ser contradictoria e incoherente. Surge de una ideología político-religiosa que aunó la lengua al dominio imperial y a la imposición de una religión (¨hablar cristiano¨) y es también resultado de la mala formación intelectual de siglos. La creencia de que ¨todos debiéramos hablar lo mismo¨ es profunda y llevó a que se quisiera imponer el castellano en toda la península ibérica y a que se aspirase en el fondo a que todo el mundo lo hablase y no hubiese que aprender ningún otro idioma. Pero también llevó a creer que hay que tener el idioma más fuerte del mundo en cada momento, por lo que se copió todo del francés cuando se creía que era el idioma del presente y del futuro y ahora se quiere copiar todo del inglés y se descuida y maltrata el español. Puede verse lo mala que es la enseñanza intelectual en España en cómo se enseñan y no se aprenden los idiomas. Todo el mundo está desespe

Elites y deferencia

Teresa Barro Las elites manejaron el mundo a su antojo y en su provecho, no sólo porque tenían poder y riqueza para hacerlo, sino porque los de ¨abajo¨ siempre sintieron deferencia hacia los de ¨arriba¨, los consideraron superiores y soñaron con ser como ellos. El modo en que se manejaron las religiones ayudó a insertar la sumisión y adoración al superior en la sociedad humana.   Las elites estuvieron siempre divinizadas e idolatradas, y eso hizo que no perdiesen nunca el poder y se lo repartiesen entre ellas. En este momento se ve con claridad que la política, la religión, la cultura, la enseñanza y la economía y el bienestar general de las naciones están en manos de las elites, y que esas elites lo que quieren es que haya pobreza, desesperación y falta de oportunidades para que todo tenga que depender de ellas. Se supone que el capitalismo crea riqueza, pero en el manejo de la economía de estas últimas décadas   no hubo el mínimo intento de crear prosperidad, sino de acabar

Bienes básicos

Teresa Barro Hay bienes básicos y fundamentales que tendrían que ser para todos. Uno de esos bienes es la electricidad, de la que tantas cosas dependen y cuyo uso fácil y barato tendría que considerarse imprescindible a nivel individual y colectivo. Hacer que la electricidad sea barata y esté al alcance de todos no sólo cubriría necesidades básicas del ser humano, sino que, al abaratar la producción, el comercio y el transporte, podría traer beneficios para los países que se lo propongan. Centrar el cómo conseguir electricidad abundante y barata en si tendría que estar a cargo del Estado o del sector privado sería caer en el juego ideológico que sólo favorece a las elites. A las elites les es tan fácil dominar y aprovecharse cuando todo es del Estado como cuando todo es del sector privado.    Habría que partir del principio de que la economía es para las personas y no las personas para la economía. La economía funcionó mal porque se manejó con codicia, soberbia, avaric